Negando los crímenes de Lesa Humanidad que el régimen de Nicolás Maduro ha cometido, no hará que estos desaparezcan.
Y esta fue la infeliz intención del fiscal títere de Maduro, Tarek William Saab, que luego de su fracasada misión ante la Corte Penal Internacional, tuvo el desatino de afirmar que “no se puede tipificar que en Venezuela existan crímenes de lesa humanidad”, para luego rematar diciendo que sobre este país no se ha iniciado una investigación, “pese a los esfuerzos de medios para transmitir noticias falsas”.
Esto lo dice un sujeto que a lo único que se ha dedicado es a negar y ocultar cualquier investigación sobre los graves crímenes que se han perpetrado en el país.
La gran verdad es que Nicolás Maduro cometió delitos de Lesa Humanidad, así lo confirmó recientemente la Corte Penal Internacional al admitir la causa contra el régimen, cuando señaló haber hallado indicios de la perpetración de estos crímenes, también lo concluyó la Misión Independiente para la Determinación de Hechos en su informe sobre Venezuela y lo respalda cada informe de la Alta Comisionada de los Derechos Humanos de la ONU, entre otros registros.
Entonces señor Saab, al negar usted estos crímenes, se convierte en cómplice del criminal mayor.
Pero queremos recordarle además señor Saab, lo que define la norma internacional sobre los crímenes de Lesa Humanidad.
Solo por citar el Estatuto de Roma, en su artículo 7, señala que se entienden por “crimen de lesa humanidad” cualquiera de los actos siguientes cuando se cometa como parte de un ataque generalizado o sistemático contra una población civil y con conocimiento de dicho ataque. Contempla asesinato; exterminio; esclavitud; deportación o traslado forzoso de población; encarcelación u otra privación grave de la libertad física en violación de normas fundamentales de derecho internacional; tortura; violación, esclavitud sexual, prostitución forzada, embarazo forzado, esterilización forzada o cualquier otra forma de violencia sexual de gravedad comparable; persecución de un grupo o colectividad con identidad propia fundada en motivos políticos, raciales, nacionales, étnicos, culturales, religiosos, de género, u otros motivos universalmente reconocidos como inaceptables con arreglo al derecho internacional; la desaparición forzada de personas; el crimen de apartheid; y otros actos inhumanos de carácter similar que causen intencionalmente grandes sufrimientos o atenten gravemente contra la integridad física o la salud mental o física.
Solo en base a esta norma, ¿Acaso las muertes, encarcelaciones, desapariciones, torturas y violaciones cometidas por el régimen venezolanos en el período de 2014 a 2017, no evidencian para el fiscal marioneta de Maduro, crímenes de Lesa Humanidad?
Con su nefasta declaración Tarek pretendió negar las violaciones registradas durante las protestas masivas, especialmente las registradas durante estos últimos años, en los cuales fueron asesinados decenas de manifestantes a quienes se les disparó con armas de fuego y armas menos letales, así como les fueron practicadas torturas y otros malos tratos durante la detención, como palizas, humillaciones, violencia sexual y de género, y simulacros de ejecución, según lo certificó el informe de la misión de Determinación de Hechos. Sin mencionar hechos como ejecuciones y asesinatos de presos políticos.
Se trata en definitiva de crímenes de Lesa Humanidad y punto, Nicolás Maduro dirige un régimen que está señalado internacionalmente de haber cometido estos graves crímenes y eso no lo podrá tapar, ni ocultar, ningún fiscal fantoche, así se dedique a negarlo de por vida.
Son crímenes que no prescriben, sus autores materiales e intelectuales, sus coautores y quienes ordenaron su ejecución, a todos le tocara la puerta la justicia internacional. Y sus víctimas, los familiares de estas víctimas, tendrán que ser resarcidos por tanto dolor y por tanta denegación de justicia.
Así que Tarek, en vez de dedicarte a mentir y manipular, recuérdale mejor a Nicolás, que los crímenes de Lesa Humanidad no desaparecen y tampoco prescriben.