¡Escuche a las víctimas y no a los victimarios!, ese es el clamor que los venezolanos le hacemos a Karim Ahmed Khan, fiscal de la Corte Penal Internacional, quien en los próximos días estará en Venezuela.
Sabemos que el régimen montará su show, lucirá su mejor traje de manso cordero para intentar ocultar sus garras y colmillo de hiena carroñera. Disfrazará de víctimas a algunos, y ocultará a los verdaderos, pintará fachadas, y mazmorras. Tratará por todas las vías de desviar la atención del visitante, mentirá, y hará hasta lo imposible para tapar los crímenes de Lesa Humanidad por los que le investiga la CPI. Eso lo sabemos.
Pero también sabemos que Khan, en su condición de fiscal de la jurisdicción penal internacional que halló serios indicios sobre la implicación del régimen de Nicolás Maduro en crímenes contra la humanidad, estará obligado a escuchar a las víctimas; a la familia de los asesinados por este régimen, a los torturados y violados, y a los más de 250 presos políticos que permanecen tras las rejas, porque ellos y solo ellos, son los portadores de la verdad y de la justicia.
También estamos conscientes que la misión del fiscal de la CPI en su visita será determinar cuán dispuesto está el régimen para cooperar, investigar, juzgar y sancionar a los responsables de crímenes de Lesa Humanidad, documentados en el examen preliminar abierto desde febrero de 2018. Y estamos claros que, aunque quieran disimular, quieran maquillar la realidad, nunca ha habido verdadera disposición, ni ánimo de justicia, porque al hacerlo, implicaría a toda la cadena de mando, encabezada por el mismo Nicolás.
Se trata de una visita histórica, es la primera vez que la CPI va a Venezuela a constatar lo que arrojan los exámenes preliminares por la presunta comisión de crímenes de Lesa Humanidad. Tal como lo determinó su antecesora Fatou Bensouda.
Ella encontró que había bases razonables sobre estos estos crímenes cometidos bajo el mandato de Nicolás Maduro y también concluyó que la justicia venezolana no hace nada para sancionar a los perpetradores, y no en vano, es la misma conclusión a la que llegó la Misión Internacional Independiente de Determinación de hechos sobre Venezuela.
Vale también la pena recordar que esta investigación inició su curso en el 2018 a petición de los mandatarios de Argentina, Canadá, Colombia, Chile, Paraguay y Perú, miembros del Grupo de Lima, quienes se unieron en aquella ocasión para hacerle frente al régimen venezolano y ponerle freno a las atrocidades que ha venido cometiendo en contra del pueblo venezolano.
Desde entonces inició la causa, misma que tardó dos años para que se produjera el primer pronunciamiento. Hasta ahora esta investigación se encuentra en fase de examen preliminar, del cual se espera que procedan otros pasos, que según el proceso penal de la CPI, estos son: investigación, juicio y condena, apelación, sentencia firme y cumplimiento de la pena.
Es un proceso que se ha llevado su tiempo, pero como siempre hemos sostenido: La justicia tarda pero llegará.
Esperamos mucho de esta visita, aspiramos que el fiscal Karim Khan de la CPI se mantenga acucioso y no permita ser secuestrado por el régimen o encerrado en lujosos hoteles con agendas secretas para alejarlo de la verdad. Una verdad tan grave y tan grande que de llegar a ella, finalmente la justicia se impondrá y Nicolás Maduro, terminará pagando por los crímenes cometidos en contra de los venezolanos.
Por ello insistimos y le pedimos al fiscal de la CPI, escuche a las víctimas y no se deje engañar por los victimarios.
